Garabandal y Asturias
7 días / 6 noches | Visitarás: San Sebastián de Garabandal - Santa María de Lebeña - Santo Toribio de Liébana - Potes - Oviedo - Cudillero - Covadonga
La peregrinación a Garabandal y Asturias es una invitación a sumergirse en el misterio y la devoción que envuelven las apariciones Marianas, y a la vez, es una oportunidad para explorar la rica geografía, la exquisita gastronomía y los impresionantes paisajes que caracterizan a Cantabria y Asturias. Este viaje no solo es un camino de fe, sino también una aventura por dos de las regiones más bellas de España.
Garabandal: Un Encuentro con lo Sagrado: Garabandal es un pequeño pueblo en Cantabria conocido por las apariciones Marianas que tuvieron lugar en la década de 1960. Aquí, se dice que la Virgen María se apareció a cuatro niñas, entregando mensajes de importancia universal. El lugar de las apariciones, aún sin reconocimiento oficial por la Iglesia, sigue atrayendo a peregrinos de todo el mundo, buscando experimentar la paz y la espiritualidad que emana de este lugar sagrado.
Asturias: La Belleza del Paisaje y la Cultura: Asturias, conocida como el Paraíso Natural, es una tierra de contrastes donde la majestuosidad de las montañas se encuentra con el brillo del mar Cantábrico. Es una región que ofrece desde playas idílicas hasta parques naturales como los Picos de Europa, donde cada rincón es un descubrimiento. Además, su patrimonio cultural es vasto, con monumentos prerrománicos como Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo, que son Patrimonio de la Humanidad.
La Gastronomía: Un Viaje por los Sabores: La ruta por Cantabria y Asturias también es un deleite para los amantes de la buena mesa. La gastronomía de estas regiones es un reflejo de su diversidad geográfica y cultural. En Cantabria, no se puede dejar de probar el cocido montañés, mientras que en Asturias, la fabada asturiana y la sidra son imprescindibles. Cada plato es una celebración de los productos locales y una muestra de la tradición culinaria.
Un Viaje por la Historia y la Naturaleza: Esta peregrinación es también un viaje por la historia, donde cada pueblo y cada valle tienen una historia que contar. Es una experiencia que conecta al viajero con la naturaleza en su estado más puro y con la historia viva de un país. Desde las cuevas de Altamira en Cantabria hasta los lagos de Covadonga en Asturias, la ruta es un tapiz de experiencias que quedan grabadas en la memoria.