La Cofradía de los “botiguers”, o tenderos, tiene una rica historia que se remonta a 1950. Durante muchos años, esta cofradía ha sido una presencia constante en las procesiones de los Miércoles y Viernes Santo en Reus.

Cada Miércoles Santo, la cofradía organizaba un desfile procesional que comenzaba en la ermita del Rosario y terminaba en la Prioral de San Pedro Apóstol, la sede canónica de la cofradía. Este desfile, que se iniciaba alrededor de las 22:30 horas, era conocido como la procesión de “la Desgracia”.

Los Viernes Santo, la cofradía participaba en la Solemne Procesión del Santo Entierro, organizada por la Real Congregación de la Purísima Sangre de Nuestro Señor Jesucristo.

Después de un período de inactividad debido a las circunstancias sociales en la ciudad, la cofradía reanudó sus salidas procesionales en 1995. En 1997, la cofradía volvió a desfilar en los Miércoles Santo, junto con la Hermandad de San Miguel Arcángel, conocida como la de los Manchegos. Esta procesión pasó a denominarse Solemne Procesión del Prendimiento.

En los años siguientes, se unieron a la procesión la Cofradía de Jesús de la Amargura en 2003, y la Cofradía de San Pedro Apóstol en 2010. En 2016, la Hermandad de San Miguel Arcángel desapareció, dejando a tres cofradías coorganizando la Solemne Procesión.

Durante los años de la pandemia de la Covid-19, no se celebraron procesiones. Sin embargo, después de este período de parada obligatoria, la Junta de Gobierno se renovó, dando lugar a nuevas ilusiones, proyectos y una renovación generacional. En 2023, la Solemne Procesión del Prendimiento salió por primera vez a Varales, con una cuadrilla de 24 Costaleros, marcando un hito histórico y enalteciendo los Miércoles Santos en Reus.