Siglo XVII (fecha sin determinar): Los primeros documentos datan la hermandad.

El gremio de herreros encarga la talla de una imagen de Jesús atado a la columna, realizada por Francisco de Paula Gómez Valdivieso tras un concurso de imagineros.

Siglo XIX (fecha sin determinar): La hermandad se encarga del enterramiento de sus hermanos, siendo la primera corporación en hacerlo en cementerios, y destaca por procesionar a mediados de siglo. Sin embargo, el culto público casi desaparece hasta los prolegómenos del siglo XX.

La hermandad se reactiva.

Década de los 20 del siglo XX: La cofradía goza de años de esplendor.

La cofradía se incorpora al seno de la Agrupación de Cofradías de Semana Santa.

La cofradía pierde su patrimonio en el incendio de la parroquia de la Merced.

Se encarga a Manuel Oliver la nueva talla del Señor.

Se sustituye la anterior talla del Señor por la actual, obra de Juan Vargas. Además, la hermandad se traslada a la parroquia de los Santos Mártires.

Se realiza el trono de Nuestro Padre Jesús de la Columna por Francisco Palma Burgos en madera dorada.

Se bendice la talla de María Santísima de la O, realizada por el imaginero sevillano Francisco Buiza.

1979-1985: Se realiza el trono de María Santísima de la O en talleres Villarreal.