Es un decreto emitido por el Cardenal Bueno Monreal el 25 de enero de 1967 que establece las normas sobre el orden, la música, el acompañamiento y la disciplina en las procesiones.
Es un decreto emitido por el Cardenal Bueno Monreal el 25 de enero de 1967 que establece las normas sobre el orden, la música, el acompañamiento y la disciplina en las procesiones.