Semana Santa
Las cruces de forja que coronaban el antiguo Templo Parroquial ahora adornan la nueva Iglesia
Recientemente, la Parroquia de Nuestra Señora de los Dolores ha incorporado dos cruces de forja históricas que una vez adornaron la cúpula y el campanario de la antigua iglesia parroquial en el Cerro del Águila. Esta iglesia, una creación de Aurelio Gómez Millán, sirvió como sede parroquial desde finales de 1953 hasta el 30 de septiembre de 1995, antes de ser demolida debido a su avanzado estado de deterioro.
Además de la cruz que adorna la fachada principal -la misma que se encuentra en la iglesia actual-, había otras dos cruces de forja en la antigua iglesia. Gracias a la iniciativa del párroco, Francisco Javier Brazo Delgado, estas cruces han sido restauradas y ahora se exhiben en la iglesia parroquial actual. Se les ha sometido a un tratamiento para eliminar el óxido acumulado a lo largo de los años y se han galvanizado para protegerlas de la corrosión atmosférica en el futuro.
La cruz más pequeña de las dos, que una vez coronó la cúpula central de la antigua parroquia, ahora se puede ver en la fachada lateral de la calle Afán de Ribera. La cruz más grande, que una vez estuvo en el campanario desde donde se convocaba a los vecinos del Cerro del Águila a los servicios religiosos durante décadas, ahora se encuentra en la fachada posterior de la calle Diamantino García Acosta.
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