Según los datos del Instituto Nacional de Estadística, casi 5 millones de personas viven solas en España. De éstas, 2 millones son mayores de 65 años. Y después de la irrupción de la COVID-19, este número lamentablemente ha aumentado.
Es nuestro deber como miembros activos de la Iglesia darnos apoyo en la soledad y trabajar para que estas personas no se sientan olvidadas. Pueden vivir solos, pero no tienen porqué estar en soledad. Cuando sepas de alguien que está solo, salúdale y si puedes haz algo para que no sienta su soledad.
Si eres hermano de nuestra Hermandad y estás solo, no dudes en ponerte en contacto con nosotros, somos hermanos y debemos apoyarnos y cuidarnos.